El 23 de julio de 2022, la Organización Mundial de la Salud (OMS) declaró que el brote mundial de viruela del mono era una emergencia de salud pública de importancia internacional. La Dra. Elaine Black, directora de Seguridad alimentaria y salud pública de Ecolab, y Kaycee Strewler, especialista técnica principal en cuentas, brindan una descripción general de la viruela del mono y cómo minimizar los riesgos asociados con este virus.

1. ¿Qué es la viruela del mono?

   La viruela del mono es una enfermedad rara causada por la infección con el virus de la viruela del mono, que es parte de la misma familia del virus variola, que provoca de la viruela. El virus de la viruela del mono no es nuevo: el primer caso humano se registró en 1970; sin embargo, el brote actual se ha extendido a muchos países donde no se había encontrado el virus antes.

    

2. ¿Cuáles son los signos y síntomas de la viruela del mono?

   Una infección de viruela del mono comienza con dolor de cabeza, dolores musculares, fiebre, ganglios linfáticos inflamados y agotamiento, seguido por el desarrollo de una erupción o lesiones, a menudo inicialmente en la cara y luego se extiende a otras partes del cuerpo. Las lesiones progresan a través de varias etapas que dan como resultado pústulas que forman costras y se caen.

   El período de incubación de la viruela del mono suele ser de 7 a 10 días, pero puede variar de 5 a 21 días, y la enfermedad suele durar 2 a 4 semanas. En brotes anteriores, la viruela del mono causó la muerte de una de cada 10 personas que se infectaron; sin embargo, se han informado muy pocas muertes en el brote actual. Los tratamientos (medicamentos antivirales y vacunas) están disponibles y pueden ser específicos de la región y restringidos a poblaciones de alto riesgo.

    

3. ¿Cómo se produce la transmisión de la viruela del mono?

   El virus de la viruela del mono se propaga entre las personas principalmente a través del contacto directo con llagas, costras o fluidos corporales infecciosos, y se puede propagar a través de las secreciones respiratorias, aunque el alcance de la transmisión respiratoria aún está bajo estudio.  El virus también puede propagarse a través del contacto con superficies o sábanas contaminadas. 

   Si bien los brotes anteriores se han asociado con la transmisión de animal a humano o el consumo de carne de un animal infectado, la propagación del brote actual se ha producido principalmente a través del contacto prolongado de persona a persona. En este momento, los alimentos y el agua no han sido implicados como rutas de transmisión en el brote actual.

    

4. ¿Cuáles son algunas de las buenas prácticas para ayudar a evitar la viruela del mono?

   Lavarse bien las manos con agua y jabón es una de las mejores maneras de ayudar a evitar la transmisión de patógenos. Lávese las manos con frecuencia con agua y jabón o use un desinfectante para manos a base de alcohol. Si sus manos están visiblemente sucias, use agua y jabón antes de aplicar el desinfectante para manos.

   Evite el contacto cercano de piel con piel con personas que tengan un sarpullido y evite compartir platos y utensilios para comer.   

   Desinfecte las superficies duras y no porosas que se tocan con frecuencia, incluidas las perillas de las puertas, los interruptores de luz y las barandas con un desinfectante registrado por la EPA con una declaración de patógenos virales emergentes (EVP). Ecolab ofrece muchos desinfectantes con ese rótulo, incluidos el desinfectante y limpiador de superficies multiuso con peróxido (n.º de registro de la EPA 1677-238). Siga las instrucciones de la etiqueta del producto para garantizar un uso adecuado.  

    

5. ¿Qué pasos pueden seguir los hoteles y otras empresas para ayudar a mantener la salud a los empleados y clientes, y ayudar a prevenir la propagación de la viruela del mono?
   Hay varios pasos que las empresas, particularmente aquellas dentro de la industria hotelera, pueden seguir para ayudar a proteger a sus empleados y huéspedes:  

• Los operadores deben revisar y reforzar las prácticas de prevención de infecciones con los empleados (por ejemplo, requisitos de equipo de protección personal (EPP), prácticas de higiene de manos, desinfección adecuada de superficies) y considerar la posibilidad de facilitar sesiones educativas para los empleados sobre los signos, síntomas y factores de riesgo para contraer la viruela del mono.

• Los operadores deben asegurarse de que los suministros para la higiene de las manos estén fácilmente disponibles en el punto de uso en los lugares pertinentes (por ejemplo, baños, cocina o áreas de preparación de alimentos, áreas de mucho tráfico, como entradas y salidas).

• Las superficies duras y no porosas de alto contacto deben desinfectarse con un desinfectante registrado por la EPA para patógenos virales emergentes. Los platos y utensilios para comer deben lavarse de acuerdo con el código alimentario de la FDA de EE. UU..
   
• Los empleados deben usar el equipo de protección personal adecuado, como guantes desechables y una máscara que se ajuste bien cuando limpien o manipulen la ropa blanca, particularmente en regiones que se sabe que tienen un alto riesgo de viruela del mono o cuando una persona que se sospecha o se ha confirmado que tiene la viruela del mono ha ocupado el área.  Asegúrese de que la ropa de cama sucia esté en una bolsa de lavandería u otro contenedor y evite sacudirla o manipularla de manera que pueda dispersar material infeccioso. Lave la ropa de cama (por ejemplo toallas, sábanas, ropa) siguiendo los protocolos de lavado estándar, incluidos los productos de Ecolab y las fórmulas de lavado existentes. 

Acerca de las especialistas:

La Dra. Elaine Black, directora de seguridad alimentaria y salud pública de Ecolab, es la especialista en salud pública y microbióloga que lidera iniciativas de programas y políticas, incluido el compromiso con clientes clave y organizaciones profesionales.

Kaycee Strewler, M.S., principal especialista técnica de cuentas de Ecolab, es especialista en salud pública dentro de la división Institucional de la empresa y se desempeña como consultora técnica para clientes de cuentas corporativas globales, brindando orientación sobre salud pública y buenas prácticas para la higiene personal y ambiental.